• En el Hospital General de México existe la Clínica de la Obesidad para su control y tratamiento

En la actualidad hay más de 11 millones de mujeres de 12 a 49 años de edad con sobrepeso u obesidad, problemas cada vez más frecuentes en México. En este grupo de población, por ejemplo, la prevalencia aumentó de 35.1 por ciento en 1988 a 52.5 por ciento en 1999.

La Encuesta Nacional de Nutrición también ha documentado sobrepeso en niños y adolescentes, se calcula que 5.3 por ciento de los menores de cinco años y 27.5 por ciento de entre cinco y 11 años de edad presentan sobrepeso u obesidad, por lo cual es previsible que presente problemas mayores cuando sea adulto.

El sobrepeso y la obesidad son más comunes en el norte del país, pero no son exclusivos de las poblaciones de mayores recursos. El Programa de Educación, Salud y Alimentación (PROGRESA) mostró una prevalencia de casi 40 por ciento en mujeres pobres en edad reproductiva.

Ante esta situación, el Programa Nacional de Salud 2001-2006 tiene como prioridad realizar acciones tendientes a disminuir esta problemática en la población mexicana, entre las que destacan promover la actividad física y las dietas bajas en calorías entre adultos, escolares y adolescentes, así como brindar atención a quienes padecen ambos males.

El Hospital General de México de la Secretaría de Salud cuenta con la Clínica de la Obesidad en donde los casos de menor gravedad son atendidos en el servicio de endocrinología. Este problema representa la segunda causa de atención en este centro hospitalario en el que durante el periodo de 1999 al 2001 se registraron cuatro mil 49 consultas.

La doctora Sara Arellano Montaño, jefa del servicio de Endocrinología del Hospital General de México, explicó que la gente acumula grasa porque su actividad física no es acorde con su ingesta calórica; es decir, lo que come contiene una cantidad de energía mayor que la requerida para su vida diaria.

Dio a conocer que la obesidad se caracteriza por el aumento de grasa en el organismo, el cual ocasiona un deterioro en la imagen del individuo, así como su exclusión social.

Detalló que a mayor edad aumenta la posibilidad de engordar y se presenta con más frecuencia en la mujer que en el hombre, en relación de dos a uno. Este padecimiento ocasiona además mayor riesgo de desarrollar enfermedades como hipertensión arterial, diabetes mellitus, problemas cardiovasculares, ortopédicos y respiratorios.

De acuerdo con la talla de los mexicanos, el Indice de Masa Corporal (IMC) normal para el país es de 15 a 25; de 26 a 30 ya se considera sobrepeso y arriba de 30 es obesidad. Para determinar que una persona es obesa se aplica el método de IMC, al multiplicar la talla al cuadrado y dividir el peso del individuo entre el resultado que se obtenga. Por ejemplo, una persona mide 1.60 y pesa 80 kilos. Al multiplicar la talla al cuadrado se obtiene 2.56; se divide su peso que es de 80 kilos entre 2.56, lo cual da como resultado 31.25 de IMC.

La especialista precisó que el tratamiento contra la obesidad con base en un régimen adecuado de alimentación, aunado a un programa de ejercicio, debe ser acorde a la previa valoración médica de cada individuo. No se recomienda realizar dietas por cuenta propia pues podría desencadenar problemas vasculares.

La recomendación universal es tener una alimentación balanceada con todos los grupos alimenticios, como las proteínas que da la leche, la carne y el huevo, consumir frutas y verduras para obtener fibra, vitaminas y minerales, así como cereales, azúcares o hidratos de carbono.

La doctora Arellano Montaño señaló que uno de los problemas para el individuo obeso es aceptar que debe cambiar su estilo de vida y eliminar la ansiedad que los orilla a comer a cada instante. Para ello requiere apoyo psicológico.

La especialista indicó que para prevenir la obesidad es importante evitar el consumo de comida chatarra, refrescos y alimentos con alta cantidad de grasa.